El tratamiento suele pasar por rellenar la zona de la ojera hundida con ácido hialurónico. En función del grado de profundidad de la ojera la durabilidad será de entre 1 año o 2 años. De hecho, en la actualidad, existe un producto elaborado con esta sustancia que es exclusivo y específico para este fin.
Las personas que presentan flacidez en la zona del párpado inferior y bolsas que marcan una línea de ojera hundida también pueden beneficiarse de los efectos del ácido hialurónico e incluso, según valoración médica previa, considerar una cirugía de párpados.
El tratamiento con ácido hialurónico dura entre 30 y 40 minutos y es ambulatorio, es indoloro, no necesita baja laboral y existen muy pocas posibilidades de que se padezcan hematomas, ya que se trabaja la zona con cánulas. Actualmente, es uno de los tratamientos para eliminar las ojeras más eficaces y seguros que existen.
Los rellenos faciales son uno de los tratamientos más populares en medicina estética a día de hoy, ya que ofrecen buenos resultados sin la necesidad de someterse a una intervención quirúrgica. Estos resultados se consiguen de manera no invasiva, sin riesgos y sin efectos secundarios.
Estos rellenos se utilizan para eliminar las arrugas y los surcos más marcados en el rostro, reponer volúmenes o simplemente rejuvenecer y revitalizar la piel. Las infiltraciones son a base de ácido hialurónico, hilos de policaprolactona, ácido poliláctico, hidrociapatita cálcica y fosfato tricálcico, colágeno o grasa corporal.
Todos los rellenos se aplican con anestesia local, y pueden aplicarse de manera complementaria a otros tratamientos como la cirugía facial o la toxina botulínica.
Los rellenos faciales se utilizan para rejuvenecer y revitalizar la piel del rostro de una persona. Así, mediante distintos tipos de infiltraciones se consigue dar más naturalidad al rostro a la vez que se rejuvenece gracias a la capacidad para reponer volúmenes perdidos, resaltar mejillas o pómulos y acabar con las arrugas y surcos del rostro.
Con los rellenos se consigue reducir el descenso de los tejidos faciales, castigados con el paso de la edad y acabando con la sensación de que la piel de la cara cuelga y se cae, acabando con la sensación de flacidez y falta de firmeza en el rostro.
Existen diferentes técnicas de infiltración de materiales de relleno.
Existen diferentes técnicas de infiltración de materiales de relleno, y se emplean en función de la zona a tratar, como el tipo de arruga, su localización o su profundidad.